Mi Amigo Militar
- Anonimo
- 20 jul 2015
- 3 Min. de lectura
Confieso que conocí por Facebook a un amigo que es militar, teníamos mucho tiempo de escribirnos y habitualmente teníamos sexo por teléfono, nos hacíamos llamadas a altas horas de la noche y nos gustaba masturbarnos juntos, nos veíamos por web cam y me enviaba fotos muy ricas, cuando lo vi me planto un mega besote muy rico, yo sabía que el invitarme a comer era únicamente el pretexto. Me llevo a su casa dentro de un campo militar, la casa era linda y el muy guapo, como todo militar (o por lo menos la mayoría) el tenia los brazos fuertes, espalda ancha y muy buen cuerpo, bajito, de piel blanca, me volvía loca. Al llegar a la casa comenzamos a besarnos él fue directo al punto, yo estaba sentada en el sillón llevaba un pantalón de mezclilla y una blusa azul con escote al frente, tacones y una tanga blanca semi transparente, comenzamos a besarnos y como era la primera vez que lo veía yo sentía un poco de nervios, ya nos habíamos dicho y hecho por teléfono de todo, entre los besos en los labios y en el cuello el Tacaba mis pechos, no le fue difícil tocarlos ya que mi blusa permitía perfectamente que el metiera la mano, me acaricio los pezones mientras seguía besando mis labios, el prácticamente encima de mí y yo seguía sentada en el sillón, me besaba tan rico que comencé a sentir humedad entre mis piernas, realmente me fascinaba, estaba recién bañado, olía delicioso, me encantaba la forma en la que se me acercaba con ganas de llevarme a su cama. Continuamos con los besos y las caricias el abrió mi blusa y saco mis tetas y mordió los pezones y los beso tan rico que me existe mucho más, si algo me encanta es que me chupen los pezones, me edita demasiado y Luis, mi amigo, lo hacía delicioso. Mientras el me besaba los pezones yo le besaba el cuello y acariciaba su verga por encima del pantalón, de un momento a otro escuchamos ruido a fuera pero era la vecina que había llegado a la casa de alado, continuamos, las ventanas de la casa estaban abiertas y se veían otras casas así que nos fuimos a la recamara, ahí nos sentamos en la cama y comenzó a desabotonar mi pantalón solo lo deje meter la mamo para que sintiera lo mojada que me tenía, y se dio cuenta de las ganas que me provocaba, estaba más empapada que otros días, en sabía que me volvía loca por teléfono y que me hacía escurrir con su voz imaginándolo, ese día por fin era real, yo estaba totalmente empapada, él se sorprendió de lo húmeda que estaba, comenzó a jugar con sus dedos en mi vagina, al mismo tiempo yo me recosté en la cama y él se quedó de pie, abrí su pantalón saque su verga totalmente dura y comencé a lamer la cabecita, escuche un quejido de placer que me provoco aún más, ver su cara me excitaba, realmente estaba disfrutando esa mamada, metí su verga en mi boca varias veces, acaricie sus bolas y Lamí la cabecita, sentía tanto placer como él, me encantaba estarle chupando la verga a un militar, me excita demasiado saber que era un militar, seguí acariciándolo, jugando con el en mi boca, me encanto esa sensación cuando llegaba hasta mi garganta, entraba y salía de mi boca y el seguía gimiendo del placer, tomo mi cabeza y a su ritmo siguió metiéndola en mi boca yo estaba completamente decidida a hacerlo terminar en mi boca, Así que incremente e ritmo y la fuerza hasta que sentí que iba a terminar, abrí la boca grande, metí su verga en mi boca y me prepare a recibir el chorro de semen, el me pregunto si lo sacaba y yo le dije que no, haciéndolo llenarme la boca de semen, sentí el chorro rico inundar mi garganta y llenarme la boca de ese líquido caliente que disfrute muchísimo, como buena mujer me lo trague y mi amigo se sorprendió que no dejara ni una gota en el suelo, seguí lamiéndolo y le limpie la verga hasta sacarle la última gota de miel, me encanto en ese momento supe que me esperaba una deliciosa sección de sexo. Y así fue, pero eso se los terminare de contar después.
Comments